NUEVO ESPACIO PARA COMPARTIR

En esta foto se ven las montañas "abriendo sus puertas" para que entre la ruta y el río juntos al pueblo, quizás el más lindo de la Argentina, colgado al pie de esa piedra impresionante que es el cerro Fitz Roy.
Ese pueblo que nos invita a pasar es El Chaltén, en la patagónica Santa Cruz.
Esta página, es como esa puerta, que permite mirar en el lugar en que subo algunas de las cosas de mi archivo personal, que me acompaña a todas partes. La mayor parte de ellas, pertenecen a otra gente; otras, las menos, son propias.
Algunas, a algunos cercanos a mi vida, a mis afectos. A una parte de ellas, algunos hábiles talentosos les han puesto música.
Otras no la precisan.
Seguiré buscando y subiendo otras cosas por allí, nuevas y no tanto, las que de a poco se irán haciendo mías también.
Espero que las disfruten tanto como las disfruto yo.
Y si quieren subir algún comentario, será bienvenido..!
(rt)




jueves, febrero 03, 2011

PACTO ENTRE CABALLEROS, de Joaquín Sabina

No pasaba de los veinte el mayor de los tres chicos que vinieron a atracarme el mes pasado.

"Subvenciónanos un pico, y no te hagas el valiente
que me pongo muy nervioso si me enfado."

Me pillaron diez quinientas y un peluco marca Omega,
con un pincho de cocina en la garganta.
Pero el bizco se dio cuenta y me dijo

-"Oye, colega, te pareces al Sabina ése que canta."

Era un noche cualquiera, puede ser que fuera trece,
¿Qué más da? Pudiera ser que fuera martes.
Sólo se que algunas veces, cuando menos te lo esperas,
el diablo va y se pone de tu parte.

-"Este encuentro hay que mojarlo con jarabe de litrona,
compañeros, antes de que cante el gallo"-

-"Tranquilo, tronco, perdona, y un trago pa´ celebrarlo"- ,
los tres iban hasta el culo de caballo.

A una barra americana me llevaron por la cara,
no dejaron que pagara ni una ronda, controlaban tres fulanas
pero a mi me reservaban los encantos de "Maruja la cachonda".
Nos pusimos como motos con la birra y los canutos.
Se cortaron de meterse algo más fuerte.
Nos hicimos unas fotos de cabina en tres minutos...,
parecemos la cuadrilla de la muerte.

Protegidos por la luna cogieron prestado un coche,
me dejaron en mi queli y se borraron por las venas de la noche

-"Enrollate y haznos una copla guapa de la tuyas"- me gritaron.

Me devolvieron intacto, con un guiño mi dinero,
la cadena, la cartera y el reloj.
Yo, que siempre cumplo un pacto cuando es entre caballeros,
les tenía que escribir esta canción.

Hoy venía en el diario el careto del más alto,
no lo había vuelto a ver desde aquel día.
Escapaba del asalto al chalé de un millonario,
y en la puerta le espera la policía.
Mucha, mucha policía...


Todo el mundo me pregunta si la historia es cierta.
A mí sólo me importa si la canción es buena.

No hay comentarios:

Publicar un comentario